sábado, 28 de mayo de 2016

¿ QUÉ ES LA VIDA?




Es la posibilidad de viajar a un mundo de vibración inferior..., es decir, un mundo que no ha alcanzado el equilibrio y la armonía. Es la posibilidad de experimentarla a través de un sin fin de experiencias.
El ser humano cuando aceptó esta experiencia de vida, sabía que tenía que bajar a un planeta dual, basado en los polos opuestos. Para ello tuvo que olvidar toda la información guardada en su alma. Es decir, tenía que empezar de cero, sin recordar realmente quien es y para qué vino aquí. Al aceptar bajar a esta tierra y entrar en contacto con la materia, en el momento de su nacimiento, fue despojado de toda la sabiduría guardada en su alma, espíritu.
Cuando encarnamos dejamos atrás todas las vivencias y conocimientos experimentados en otras vidas y niveles de existencia. El ser humano eligió empezar desde cero para lograr su crecimiento y evolución hacia otro nivel de experiencia. Para ello necesitaba ser como un niño, sin recuerdos de otras vidas y dimensiones, de otra forma no habría sido capaz de soportar las pruebas que tenía que soportar, para darse cuenta que esta imagen suya 3D, no es su verdadera identidad, ni imagen.
Al nacer en este plano nos olvidamos de todo aquel conocimiento que teníamos, elegimos la posibilidad de crecer y evolucionar desde la ignorancia de nuestra verdadera naturaleza. Pero llega un momento que el hombre se cansa de repetir siempre las mismas historias..., las mismas experiencias, se da cuenta de que ese no es el camino, que ese no es el verdadero hogar, entonces decide dar un salto en su escala evolutiva, de experiencias, y comienza a hacerse preguntas trascendentales..., para lograr descifrar su naturaleza... Se vuelve el observador de su vida..., de sus actos, de sus pensamientos, ideas, creencias, de sus reacciones…


En este momento empieza a despertar y se hace consciente de que ese no es el camino, que aquel camino anterior no lo lleva de vuelta al hogar, entonces decide averiguar y conocer quién Es, y para qué está aquí. Ya no cree aquello que una vez le contaron..., que sólo estaba aquí de paso y que la estancia en este planeta era una vida de pruebas, sufrimientos y escasez…
                                                                                        

El empieza a prestar atención a cada movimiento de su vida..., a cada concepto, reacción y empieza a comprobar que cada circunstancia, cada hecho es una consecuencia de un pensamiento, de una acción, una idea, una creencia o una reacción, y que todo eso lo hemos creados nosotros con nuestra energía.


Decide escalar en la escalera evolutiva... de la ascensión, decide cambiar cada idea, cada emoción, cada reacción, cada regla, concepto, dolor o sufrimiento…
Ha aprendido que con su energía, con su Poder... puede hacer cosas mucho mejores de las que había estado haciendo hasta ahora y que no hacía por su ignorancia.


Empieza a trabajar en sí mismo y comienza a descubrir herramientas... que tenía en su interior y que ni conocía. Mira a su alrededor y se da cuenta que ese mundo es sólo una falsa basada en la competencia, la rivalidad, el desprecio y la desvalorización, el control y el miedo de todo aquello que no está en la norma o en la regla.
                                                                                         

Se pregunta qué está haciendo aquí..., qué cuál es su papel y como puede llevarlo a cabo con facilidad y gracia...
Empieza a descubrir que todo a su alrededor es creación suya, aunque no lo hizo de manera consciente. Entonces, decide cambiar su rol, decide aprender a crear conscientemente, basándose en el amor, y en reclamar su verdadero ser..., al que aún no es capaz de reconocer, porque durante muchísimo tiempo no sabia que existía.


Poco a poco descubre que Él es mucho más de lo creyó..., de lo que pensó..., descubre una gran cantidad de herramientas que le pueden ayudar en su camino de regreso al Hogar. ..
Paso a paso va soltando lastre..., va dejando atrás todos aquellos pesos que no les sirven de nada y que todo lo que hacen, es hacerlo sentir pesado, vulnerable y sin salida.


La vida es..., la posibilidad de aprender a crecer desde los niveles más bajos de la materia, no importa cuanto tiempo... tardas en despertar, no importa que hayas vivido o no, no importa el lugar, lo realmente fundamental es que despertaste a otro nuevo estado... de conciencia, y que a partir de aquí, de pasito a pasito de vuelta al Hogar...
Tenemos todas las herramientas, todas las posibilidades y el apoyo para crecer, si es eso lo que queremos realmente...
La vida no se trata de repetir una y otra vez las mismas experiencias, cuando esto sucede es que ha llegado el momento de movernos de donde estamos..., ha llegado el momento de dar un salto hacia delante en la experiencia y la escala evolutiva...

La vida es la escuela de la experiencia.., la escuela para el crecimiento energético y espiritual..., es el lugar donde ponemos a prueba nuestras herramientas adquiridas..., ahora estas herramientas están a nuestra disposición, las podemos utilizar,para alcanzar una dimensión mucho más alta que la tercera.
Cuando atravesamos la 3, 4D, vamos camino de una vida mucho más armónica, más abundante, hermosa y feliz hacia la 5D y mucho más allá…


Vivir se trata de aprender de las experiencias, de esta vida y de otras. Cuando despertamos empieza la unión con nuestro Yo más elevado..., que no es más que nosotros mismo en otra dimensión mucho más elevada... Este yo superior tiene toda la información guardada  durante todas nuestras existencias. Esta no es la única vida que hemos experimentado. El alma, la conciencia es inmortal y cuando recordamos cambia de realidad,entonces nos vamos acercando a la Morada del Padre, que nos está esperando y a donde todos algún día volveremos, no importa cuanto tiempo pase.


El alma, el espíritu es eterno no tiene principio..., ni fin..., solo la materia tiene fecha de caducidad. La energía nunca desaparece sólo se transmuta y cambia.


No hace falta perder el cuerpo físico para ascender a otra realidad más elevada, sólo es necesario alquimizar y transmutar toda aquella energía inferior...
Tenemos ahora muchísima ayuda para ascender de los Maestros, ángeles, arcángeles y todos los seres de luz, de Gaía, del Universo, todos nos están prestando su apoyo y servicio para que lo hagamos de la forma más pacífica y benévola para todos...

jueves, 26 de mayo de 2016

LA CARCEL DE TU HISTORIA.







Cada ser humano tiene una vida llena de experiencias, vivencias, conceptos,ideas y creencias pero además tiene una herencia..., un conocimiento adquirido a través de situaciones, ideas y pensamientos y recuerdos de sus progenitores y antepasados.
Cada ser humano, cada historia es creada por él mismo, desde sus memorias, sus recuerdos, sus pensamientos, acciones, creencias y por la herencia vivida y grabada de sus ancestros, descendiente y entorno, dando lugar a la cárcel de su historia…, de la cual no es capaz de salir.


Cada individuo se pierde muchas veces durante su vida, cada vez que tiene que decidir…, y su corazón no tiene la misma opinión que su mente. Su mundo interior se ve envuelto en un torbellino, en un laberinto de emociones y sentimientos que originan una serie de alteraciones internas, ocasionando sufrimiento, dolor, pérdida y angustia.


Cada historia, cada personalidad tiene retos que conquistar. Cada personalidad sufre a lo largo de su vida mutaciones, cambios de toda índole mentales, emocionales, físicas, psicológicas, personales,sociales, etc.


Cada vida está llena de retos, de conquistas sobre sí mismo y su entorno. Nada en este mundo es estático, es inamovible, ni los hechos, ni las circunstancias, ni las ideas, percepciones, pensamientos o conceptos. Todo está en constante transformación .Pero la única naturaleza que debemos seguir es aquella que nos invita al crecimiento interior, a la profundidad de saber Quienes Somos..., donde queremos estar y vivir..., si en la mente o en el corazón y desde donde queremos vivir... si desde el control de la familia, de la sociedad y la vida material, o desde el servicio a la vida donde todos somos..., incluyendo a la familia, pero no por obligación, presión o control sino por un acto de amor y confianza.


En este mundo no estamos para servir a la materia, al poder, al control, tenemos libre albedrío y tenemos la libertad de poder elegir donde queremos estar y a que queremos servir pero por elección propia, no por manipulación de ningún tipo.



Cada historia, cada experiencia nos lleva a una situación nueva y distinta a la anterior. Pero la verdad es que le damos todo el poder a los hechos, a las circunstancias, a las vivencias, nos identificamos plenamente con la historia, con el dolor, el sufrimiento y la alegría, esta es la verdadera tragedia..., el verdadero sufrimiento y la falsa ilusión de creernos esa historia y esa vida…, somos nuestros propios carceleros...


Somos mucho más que experiencias, que sufrimiento, que materia, somos mucho más allá que la personalidad y el ego, somos mucho más que una  historia…,que un encierro, que una cárcel...
                                                                                        
Nuestra verdadera identidad, no está en un cuerpo físico basado en el carbono, nuestra verdadera vida no es una historia llena de penas y sinsabores guardadas en nuestras memorias, no somos sólo carne de cañón, no somos sólo materia basada en el carbono de nuestro ADN…, nuestro ADN lleva mucha más información de la que hemos creído hasta hace poco. Somos esencia sutil, somos energía invisible, somos maestros de la forma y la energía, somos los creadores de nuestras vidas y de nuestra energía desde siempre...


Nuestra historia no se remonta a unos hechos más o menos cercanos que recordamos o no, nuestra historia no está sólo gravada en nuestra mente, nuestra historia va mucho más allá de los recuerdos, de las historias, de nuestras familias y antepasados.
Nos creímos las historias de nuestros allegados, nos hemos creídos los actores de un mundo inventado por nosotros mismos, nos creímos esas historias y que eso era lo que somos...


Nuestras familias encierran nuestros mayores retos..., nuestra mayor trascendencia, nuestro mayor dolor, en nuestras familias están las mayores trabas y distracciones de nuestro camino... Nuestra familia controla nuestros pasos, nuestros errores y aciertos. Algunas familias nos encarcelan y privan de nuestra libertad y voluntad consciente o inconscientemente... Este es nuestro mayor desafío, nuestro mayor conflicto y nuestra mayor tragedia…

Soltemos los apegos de la familia, ellos nos dijeron que eramos... y como debíamos ser..., como debíamos vivir nuestra vida... que hacer o dejar de hacer con ella..., de como debíamos actuar o no...
La jerarquía dentro de la familia a causado grandes abusos, no debe haber titulo que tenga siempre la razón por llevarlo ( padres,hijos, hermanos, etc.), sólo Educadores... todos y cada uno de los miembros, todos tenemos algo que aprender del otro, sin importar que papel juguemos..., las únicas bases son el amor,el respeto y la paz


No somos nuestra familia, no pensamos, sentimos y vivimos como ellos. No somos esclavos..., prisioneros de sus ideas, conceptos, reglas, dolores o herencia. No somos propiedad de nuestra familia..., no le pertenecemos y ellos no nos  pertenecen, nadie es de nadie... Nadie puede privarte de tu libertad o elección de decidir como vivir tu vida...
La familia debe estar constituidas... por individuos independientes que practican la libertad... y comparten e intercambian. La familia debe basarse en el respeto, la sabiduría de cada uno, la libertad de todos y cada uno de sus miembros y el servicio de unos a otros sin obligación, presión o manipulación, sólo el amor debe prevalecer.
A veces existe violencia de algún tipo, verbal, física, moral, de autoridad, control, sexista, originando un encerramiento, una cárcel de las emociones, de la libertad, de los sentimientos, es la cárcel de tus miedos y problemas internos..., es la prisión de las proyecciones hechas para ti, de lo que debes hacer o no hacer..., basado en la ley del más fuerte o el que tiene más poder de algún tipo, por el lugar que ocupas en la familia, por la influencia, el control o la manipulación a que estas sometido por determinado rol.


La familia no debe ser un pilar de sometimiento, control o manipulación al que muchas veces estamos sometidos. La familia debe ser un lugar de educación, de ética, moral y de formación durante toda la vida, debe basarse en la confianza y la libertad de elección, debe ser el hogar donde descansamos de nuestros conflictos externos y donde encontramos el soporte de nuestra vida y relaciones, siempre desde el respeto, la humildad y la transparencia y el amor.


Hay un terrorismo familiar... basado en una jerarquía, en unas estructuras arcaicas y obsoletas, y donde hay papeles que tienen siempre la razón por el lugar que ocupa. Hay otro tipo de terrorismo familiar basado en el victimismo y la lástima,otro tipo de terrorismo familiar es el del más fuerte…, o el de mayor poder adquisitivo y el de menor.


Nuestra familia auténtica es... aquella con la que no usamos caretas, no nos escondemos, no nos protegemos,no necesitamos escondernos, donde no somos juzgados, ridiculizados ni desvalorizados, no tenemos deudas... con ellos, porque somos libres y ellos son libres de su conocimiento para usarlo de la mejor manera que crean y desde su ejemplo.
¿Esta es tu familia?.
¿Te identificas con tu familia?


La cárcel de cada historia te dice quien crees que eres..., y quien crees que no eres, te dice  que eres y que no eres..., como debes ser o actuar y cuando debes hacer o no hacer… Liberemos no de la cárcel de la historia, del personaje, de la herencia y vayamos mucho más allá...

A la familia muchas veces no le importa tus inclinaciones, tus pensamientos e ideas, sino que te dejes arrastrar por aquel que tiene el poder o el control, ya puede ser económico, profesional o clasista, sexista, o por el lugar que ocupa en la familia.


La cárcel de tu historia te dice que debes hacer y que no, te dice que está bien y que no, te dice quien debes ser y quien no, te dice cual es tu profesión y cuál no.

De nada vale que no compartas ideas, culturas, comportamientos o enseñanza de tus progenitores, lo único importante es que aceptes las órdenes del cabeza de familia si o si..., o del que tiene el poder en ese momento, sin importar como te sientes, como te encuentras o como vives.


Esto no es una familia, es una cárcel..., es una prisión, una jaula que te
lleva al borde de la locura y del precipicio…


Cada familia se debe basar en el respeto al otro y en la educación del otro a través del ejemplo, del amor, la paz... y la sencillez, no desde la arrogancia, y el orgullo de aquel que dice yo tengo o yo soy el poder o la razón por ocupar tal posición…
Cada miembro de la familia debe ser respetuoso, generoso, humilde, comprensivo y amoroso con el otro, la familia se debe basar en el amor, la confianza y la comunicación, sin luchas por el control o el dominio y sin importar si eres el padre, la madre, el hijo o el hermano. Se trata de relaciones basadas en la educación y la comprensión de cada individuo, interactuando de igual a igual, desde la humildad.

Los padres debemos educar a nuestros hijos en la igualdad, debemos enseñarles la comunicación, el dialogo, el intercambio sano sin segundadas intenciones. Nosotros como padres debemos predicar a través del ejemplo, la humildad y la sencillez. Y una vez que lleguen a la mayoría de edad dejarlos volar... sin miedo, control o manipulación a nuestro favor. Ser padres y hijos son roles muy serios y debemos ejercerlos basándonos siempre en el respeto y la comunicación de todos los miembros, jueguen el papel que jueguen en la familia...


La Familia debe estar para cubrirte de amor,confianza, para compartir aquello que se tiene y lo que no tiene, debe ser un canal para el aprendizaje y para el amor.
El Hogar, la familia debe ser el aroma de la Paz, la sencillez del amor, la abundancia del sol, la naturaleza de la belleza, todo en la familia debe ser armonía, música y canto donde todos celebramos las bendiciones, alegrías y alabanzas del cielo en la tierra y en la vida.


Ya basta de la cárcel de la familia...
Es hora de la libertad de Ser..., en la familia... y fuera de ella, en la familia de la tierra,la del planeta, la de la galaxia, del universo y de todos los Mundos Libres de la gran Confederación Galáctica...

lunes, 16 de mayo de 2016

¿ SUFRES O SANAS?





El hombre ha creído durante milenios que su naturaleza era sufrir, creyó que nuestro paso por este mundo estaba basado en el dolor, el sufrimiento, la escasez y la privación de todo aquello que le podía dar satisfacción o alegría. Creyó que había venido a esta dimensión a padecer y a expiar sus pecados o errores. La verdad nada más lejos de la realidad..., nuestro trabajo, nuestra misión o servicio está basado en llegar a comprender que... venimos a aprender desde los niveles más bajos de la creación, a través de la experiencia y la elección de vivir aquello que decidimos y elegimos.

El ser humano se ha autoimpuesto sus propias barreras..., sus propios aprendizajes para crecer, para crear desde la ignorancia de no saber quien Es realmente..., él debe investigar y explorarse a sí mismo para descubrir su naturaleza, su verdadera identidad…
Eligió un mundo sostenido por la diversidad, la variedad y destinado al estudio y su integración, pero debe hacerlo desde su interior y no buscando las claves de sus vivencias desde el exterior… El hombre no vino a este planeta a analizar, sintetizar y explorar el exterior, sino su relación con él y cómo lo resuelve y actúa desde dentro de él...
Cuando el individuo aprende a reconocerse, a verse, a observarse a sí mismo sin juicio, sin culpa, miedo o control a aquello que se escapa a su comprensión o entendimiento, entonces comienza a sanar sus heridas físicas, emocionales, energéticas y de cualquier índole.
El hombre es Poderoso..., es grande pero se perdió en la ignorancia de no saberse encontrar, o reconocer... más allá de la materia y de las formas de pensamientos. Negamos nuestras propias creaciones, nuestras elecciones, erradas o acertadas, eso no importa.
                                                                               

El ser humano enfermo..., perdió su vitalidad, su fuerza, su voluntad al olvidarse de quién era..., qué era y de dónde venía… Se centró en las creaciones menos activas y menos positivas, en las deficiencias y la falta... creando desequilibrios energéticos que acarrearon desarreglos energéticos y como consecuencias enfermedades de todo tipo: física, psicológica, emocional y material.

La enfermedad no es más que la ausencia de armonía, de equilibrio, la falta de calma, de paz interior, es la ignorancia y el olvido de no saber-te quién eres, y de donde vienes, Es la enfermedad del no Ser…

Para sanar primero de todo debemos de empezar a querer conocernos realmente a nosotros mismos, y a amarnos con nuestras virtudes o defectos, pero desde la aceptación de todas nuestras conductas y vivencias sean cuales sean, eso no tiene ningún poder.

Busquemos nuestra verdad, nuestra identidad, nuestros límites, nuestras reacciones, acciones, nuestros códigos internos y su origen sin miedo o aprensión, para reconocerlos y sanarlos...

Para sanar tenemos que buscar más en las motivaciones o el origen de nuestros conflictos, de nuestras luchas internas, de nuestras necesidades, carencias o creencias que asumimos ser y que no son nuestra verdad natural…, pero no para justificarnos, no para criticarnos o tener un concepto distorsionado de lo que somos, sino para conocer aquello con lo que nos identificamos y que nos afecta, controla o limita nuestras experiencias, capacidades o conductas y realidades.

Para sanarnos debemos conocernos profundamente…, sin miedo, juicio, vergüenza... o culpa.
El ser humano eligió crecer desde la ignorancia, eligió aprender a re descubrirse, a crecer a través de la experiencia y  de la práctica interior, pero no exterior, sólo que no lo recordamos aún.

El mundo no está fuera de nosotros, el mundo no es fuera de nosotros, nosotros no somos desde fuera, nosotros Somos el Mundo... y somos desde dentro...

Creímos que teníamos que adaptarnos al exterior, que teníamos que asumir roles y papeles, aunque no nos identificásemos con ellos. Nada más lejos de la realidad, el ser humano es Creador por naturaleza..., es decir, crea lo que proyecta desde su interior, por ello si nos centramos en aquello que no somos o que no tenemos, es lo que creamos…

Cuándo te conoces, llegas a la conclusión que tu vida es el resultado de tu mente y tu mundo interior, que nada de lo que te rodea es ajeno a ti, que de alguna manera la atrajiste hacia ti, quizás de manera inconsciente.

El hombre es pura energía... y como tal la energía es maleable..., es decir actúa según las corrientes que recibe, no puede existir nada en nuestras vidas que no hayamos dado pie nosotros de alguna manera.

Para sanar debes realizar una observación profunda de tu interior, es decir descubrir donde no existe coherencia y equilibrio en tu vida y mundo. Es necesario que revises tus emociones más profundas, que identifiques donde hay una fractura de tu ser, de tu esencia y de tu vida.
¿Donde hay conflictos en tu vida?
¿ Oyes a tu corazón o te dejas llevar por la mente y los juicios ?
¿Que haces con esas luchas internas?
Sea cuál sea el área o áreas enfermas de tu vida, hay un descuido, una desatención, un olvido, un conflicto interior…,  no escuchas a tu corazón y allí donde no eres coherente contigo mismo, no actúas de acuerdo con tu esencia, con tu naturaleza, con lo que realmente sientes. Por tanto, piensas, sientes y actúas en total desacuerdo contigo mismo…, aquí está la enfermedad…, el desequilibrio y la fisura energética y sistemática.

Hay enfermedades que pueden tener un origen genético, la verdad es que nuestro ADN es sabio y guarda información, registros de todas las vivencias y  experiencias vividas, que son transmitidas durante  generaciones. El origen es el mismo, es decir, una fractura energética no subsanada, olvidada e ignorada, un dolor que no se escuchó, una herida profunda a la que no se le dio la debida atención y no se Sanó...
                                                                                          

Si queremos sanar sea lo que sea, intentemos y  busquemos el origen, la causa que lo provocó, aquello que escondimos, que ocultamos y que nos hizo daño, nos dolió profundamente y guardamos en nuestros registros, no lo sanamos, provocando una fractura, una fisura en nuestro cuerpo energético y después el cuerpo físico.
                                                                                               
                                                                                       
Cuando empiezas a sanar en primer lugar aparece todo aquel dolor reprimido y escondido, las heridas y huellas grabadas en nuestro subconsciente e inconsciente, debemos reconocerlo para liberarlo, debemos mirar con suavidad, para aprender y sanar.
La enfermedad tiene un origen energético, antes que físico.A partir de aquí empezamos a sentirnos un poco más libres, la carga empieza a sentirse más light, comenzamos a entender el porqué de nuestras acciones, reacciones, sufrimientos y dolores, esta es la puerta para la sanación, para la libertad, nuestra libertad y la libertad de lo que somos...

Podemos mejorar cualquier enfermedad con la medicina tradicional, pero si no sanamos la raíz, la causa, el origen que la ocasionó volverá a aparecer, no importa cuanto tarde o incluso si no es a nosotros, sino a nuestra descendencia.

Por tanto si sufres no estás sano..., todos tenemos dificultades, eslabones perdidos que debemos encontrar, pero desde el descubrimiento profundo de que somos los Creadores de nuestra realidad..., pero también los Sanadores de nuestro mundo y vida...

domingo, 15 de mayo de 2016

CREENCIAS O LÍMITES





El hombre ha crecido, evolucionado y aprendido desde creencias, conceptos, ideas y reglas. Este ha sido el mundo que hemos conocido y que creímos que era la única manera de vivir.
La verdad es que el ser humano no ha sido consciente, ha estado dormido y perdido, lejos de la verdadera y única verdad. Creímos que éramos insignificantes, que no podíamos vivir más que desde el control, desde reglas y leyes que nos decían que estaba bien o no, nos decían cómo y cuándo debíamos actuar, que éramos y cómo debíamos ser y hacer, hasta dónde podíamos llegar y sobre todo no podíamos sobresalir, no podíamos destacar porque entonces eras objeto de burlas o discriminación.


El ser humano ha crecido basándose en límites, barreras, miedos, control y apegos que es la forma de crear dependencia y vulnerabilidad.


Llegó el tiempo de salir de las barreras, límites, dependencias y el control. Somos mucho más que creencias, hábitos y dependencia. Somos individuos autónomos para elegir hacia dónde queremos ir, para discernir qué somos más allá de conceptos, miedos y reglas. No podemos creer... y Ser, si crees no eres…. Se trata de entender qué significado tienen las  creencias..., ellas son: patrones limitantes energéticos…, que limitan un área o áreas de tu vida y que pueden afectar: el área afectiva, económica, social o personal o todas las áreas, y que no nos permiten expandirnos como desearíamos.


Estas creencias son de diferente origen, pueden ser  auto-generadas por nosotros mismos por ideas y conceptos que hemos tomado como nuestros y nos producen bloqueos internos que no nos permiten ir más allá de ellos, arrastrándonos a patrones de conductas restrictivos y opresivos. Otro tipo de creencias son aquellas ideas o proyecciones de los demás a las que les hemos dado cuerpo, y asumimos como reales. Algunas creencias limitan-tes son aquellas que aprendimos y heredamos de nuestros ancestros y que a través del tiempo se nos transmitió y quedó grabado en nuestra psique. Existen además creencias inconscientes grabadas en la sociedad, el colectivo que han ido dando cuerpo a una forma de egregor que tomó poder y control sobre las masas y los individuos.

                                                                                                 
                                                                                                     
La verdad es que ninguna creencia nos ayuda a ser libres. Para que una creencia nos apoye debemos basar-la en un sentir profundo y debe ir más allá de lo convencional, más allá de la forma, debe estar basada en el sentir desde el corazón sin basarnos en pensamientos o voces que no vengan de lo profundo de nuestro ser interior, allí donde no hay voces que apagar, allí donde está la verdad de lo que somos, no en una forma, no en un conocimiento prescrito, sino en el conocimiento de saberte quién eres sin forma, sin espacio y sin separación. Allí donde eres... sin creencias, pensamientos, ideas y conceptos.


Hay un lugar que no es un lugar, hay un espacio que no es espacio, hay una verdad que no es verdad, sino la Verdad Intrínseca, que es ajena a la forma, al espacio y al tiempo y que nos hace Ser desde la libertad... de sabernos ingenieros y peón de nuestra existencia.


Ser es... la forma, es... la Verdad, es... la Vida y la única salida... del hombre, sin importar cuándo, cómo o dónde, ésta es la esencia que somos y que en algún momento de nuestra existencia veremos, sentiremos y viviremos no en esta forma sino en cualquier forma, como en ninguna forma...


Las creencias ya no nos sirven, ya no funcionan en esta nueva matriz. Los patrones de comportamientos, las antiguas reglas, pensamientos, conceptos ya no sirven, ya no funcionan, dejó de tener el poder, el control, la autoridad. La matriz ha cambiado, no somos los mismos, no funcionan las mismas cosas, nada es igual y van a seguir cambiando por mucho tiempo...


Debemos volver a nuestro verdadero Hogar, al origen de lo que somos, al origen del Ser, al origen de mi Verdad…


Ninguna creencia, regla o límite debe impedir alcanzar nuestra maestría, nuestra verdad y nuestra esencia. Vayamos más allá de lo conocido, des- articulemos nuestras conductas, nuestros comportamientos, nuestros patrones que durante tantísimo tiempo nos tuvo enjaulados y reprimidos. Podemos reeducar nuestra mente, nuestro cerebro, nuestro ego o personalidad, que durante tanto tiempo nos impidió abarcar nuestra esencia y ser.




Asociamos la mente con las emociones, esto hizo que le diéramos todo el poder a” la loca de la casa “ ( la mente ), las emociones alimentan los pensamientos, pero estas emociones son creadas por la personalidad o ego, no por el Ser, el ser está más allá de las sensaciones, el Ser es un Estado natural de vivir o no vivir porque Él es y está siempre sólo hay que encontrarlo, liberando los límites, los velos que creamos y a la vez sirviendo al corazón de lo que somos. Es hora de devolver cada cosa a su lugar..., es decir, al césar lo que es del cesar.
Para Ser necesitamos vivir desde el corazón, ahí está la única creencia que no es creencia sino la Certeza..., Evidencia..., la Transparencia, Inocencia, Conocimiento y Verdad del Ser.

La vida... es una ruleta, todo debe volver al origen..., a donde surgió, de donde se originó... y formó. Llegó el tiempo de la Victoria..., el tiempo de la transformación, la transmutación y regeneración de todo aquello que no fuimos capaces de ver, sentir o Experimentar. Es hora de volver al origen, es hora de girar la ruleta para empezar el regreso a la Casa del Padre, a la Morada del Padre.

martes, 10 de mayo de 2016

DE CORAZÓN A CORAZÓN.



El corazón no es sólo el músculo principal del aparato circulatorio, es además una CPU de información... Según el neuropsicólogo Paul Pearsall asegura que el corazón es 5000 veces más poderoso que el cerebro.


El corazón cumple muchas funciones en el cuerpo humano, no sólo es el motor que mueve toda la sangre , sino que además en él existen memorias, se ha probado que algunas personas trasplantadas de corazón han tenido comportamientos distintos después del trasplante y que algunos científicos asocian con comportamientos y actitudes de la persona trasplantada.


Sin corazón no hay vida y gran parte de esta vida está inscrita y guardada en el corazón de corazón, que además está íntimamente relacionada con el cerebro. El corazón manda impulsos eléctricos al cerebro, el cual actúa de acorde a estas frecuencias.
En el corazón está registrada la base de lo que somos más allá de la forma..., pero nos olvidamos de él, creímos que sólo era un músculo que bombeaba la sangre, dejamos de sentir, de hablarle, de comunicarnos con él, lo hemos ignorado, dejamos de escuchar su voz, su aliento, su latido, su conocimiento y sabiduría. Regalamos todo el poder a la mente, para que ella a través de los pensamientos, creencias, ideas y conceptos nos dominará..., así  la mente se hizo dueña y señora de nuestras vidas, nos despojo de la autonomía de sentir y vivir siendo coherente con nuestro sentir más verdadero y real.
Nos olvidamos de sentir con el corazón, nos olvidamos de preguntarle cómo se sentía, que quería, que necesitaba, nos olvidamos de que estabamos vivo y vivíamos gracias a él, nos olvidamos de su sabiduría, de su paz…, de su conocimiento sobre quienes somos, como somos y qué queremos desde la humildad, la sencillez y la verdad… de nuestro corazón, nos olvidamos de su verdad y de su herencia ancestral.
                                                                                                    

Cuando aprendemos a trabajar con él y al unísono con la mente, aprendemos de la vida a cada instante, aprendemos desde la sencillez..., desde la simplicidad de la verdad de Ser…, entonces, aprendemos que no hay más razón que Ser, que Sentir y Vivir, que sólo estamos aquí para aprender desde la experiencia…, y para volver a nuestro verdadero Hogar, que no hay dolor si eres íntegro, que el sufrimiento es consecuencia del olvido y de la ignorancia de sentir quienes somos, que somos  y para qué estamos aquí.


El corazón no entiende de reglas, de formatos, de mentiras,  el corazón no sabe de reglas, no entiende de sociedad, de dualidad, ni de extremos, el late siempre mientras estamos en esta vida.


En el corazón está el centro, el centro de todo, de  toda cosa, objeto y ser vivo, todo tiene un corazón, es decir, un centro corazón, desde donde todo se creo y originó. El corazón es la raíz, la sabia y el centro...


Si le devolvemos su autonomía, su libertad, su realidad y aprendemos a vivir desde la integridad del conocimiento más profundo, más sincero, inocente y humildes de nuestro corazón, desde nuestro Ser…, encontraríamos y recobraríamos la voluntad, la fe, la confianza y la paciencia de reencontrarnos…. con nosotros mismos, más allá de conceptos y reglas basados en ser clones, en ser marionetas de una sociedad y un colectivo que sólo busca la seguridad y el control de robots y autómatas sometidos por miedo, deficiencia y falta de ética primero para con uno mismo.


El corazón debe ser libre, inocente, sencillo y simple, no hace falta complicar la vida, no hace falta buscar los tres pies al gato. Él no entiende de intereses, conveniencias, política, reglas, él siempre es veraz para con él mismo.
Cada vez que le damos el poder a la mente, al cerebro, cada vez que hacemos caso omiso de lo que nos dice  nuestro sentir más profundo de Ser, desde el centro del centro de nuestro corazón, nos estamos negando a lo que Somos, a la Vida...y más allá de la vida que elegimos, que aceptamos y que decidimos hace muchísimo tiempo.
Para Vivir realmente es necesario aprender a identificarnos con nuestro corazón de corazón, es necesario ir más allá de lo que nos dice nuestra propia mente, que nos puede pasar si hacemos o no hacemos tal o cual cosa. La mente proyecta hologramas, proyecta una matriz imaginaria basada en concepto, ideas, reglas y formas aprendidas y adquiridas. La mente por sí sóla no es capaz de sentir, para sentir necesitamos un corazón, la mente es muy creativa pero es incapaz de sentir, la mente debe de ser dirigida por un corazón libre de prejuicios y reglas.


No se puede creer y Ser…, no se puede amar y odiar, no se puede sentir y dudar, no se puede sufrir y ser feliz, esto es dualidad, la dualidad necesita de los extremos, necesita de la oposición, la lucha, la guerra y  el control.

El amor está en el corazón del corazón..., el amor no está en el cerebro, no está en la mente. No se puede amar con la cabeza, no se debe vivir sólo desde la cabeza, hay que tener los pies en la tierra, pero hay que vivir desde el Ser… y no en el hacer, hay que aprender a vivir desde el corazón y no desde la mente.
El corazón tiene las claves de la felicidad…, la felicidad se siente desde el corazón y no desde la mente. En el corazón está la llave que unifica, vivifica, sacia y colma la existencia, él es la puerta a un mundo desconocido lleno de voluntad, de entrega, servicio, luz y amor.
El corazón es el agua que sacia, es el alimento que llena, es la luz que te colma, porque a través de él alcanzamos el amor, la independencia y la voluntad.
¿ Donde vas a encontrar otro elemento que te pueda servir más y mejor?
¿ De donde crees que tu nacistes?, sino del corazón de la Fuente, del corazón de la Creación y del corazón de ser lo que tu realmente eres…, más allá de cualquier apariencia y de cualquier ilusión…


El corazón no conoce de rivalidad, de avaricia, celos, vanidad ni orgullo, él es la humildad personificada..., la sencillez manifiesta… y la claridad de la luz…

Seamos desde el corazón, sintamos desde el corazón y vivamos desde el corazón. Seamos todo corazón y sólo corazón, donde no hay nada más que amor, luz paz, conocimiento y la alegría de aquel que está más allá de la lógica, de la razón y de creencias, ideas, conceptos y reglas arcaicas y caducas creadas para el control, el miedo y la falta de confianza e integridad de lo que Somos...