jueves, 26 de mayo de 2016

LA CARCEL DE TU HISTORIA.







Cada ser humano tiene una vida llena de experiencias, vivencias, conceptos,ideas y creencias pero además tiene una herencia..., un conocimiento adquirido a través de situaciones, ideas y pensamientos y recuerdos de sus progenitores y antepasados.
Cada ser humano, cada historia es creada por él mismo, desde sus memorias, sus recuerdos, sus pensamientos, acciones, creencias y por la herencia vivida y grabada de sus ancestros, descendiente y entorno, dando lugar a la cárcel de su historia…, de la cual no es capaz de salir.


Cada individuo se pierde muchas veces durante su vida, cada vez que tiene que decidir…, y su corazón no tiene la misma opinión que su mente. Su mundo interior se ve envuelto en un torbellino, en un laberinto de emociones y sentimientos que originan una serie de alteraciones internas, ocasionando sufrimiento, dolor, pérdida y angustia.


Cada historia, cada personalidad tiene retos que conquistar. Cada personalidad sufre a lo largo de su vida mutaciones, cambios de toda índole mentales, emocionales, físicas, psicológicas, personales,sociales, etc.


Cada vida está llena de retos, de conquistas sobre sí mismo y su entorno. Nada en este mundo es estático, es inamovible, ni los hechos, ni las circunstancias, ni las ideas, percepciones, pensamientos o conceptos. Todo está en constante transformación .Pero la única naturaleza que debemos seguir es aquella que nos invita al crecimiento interior, a la profundidad de saber Quienes Somos..., donde queremos estar y vivir..., si en la mente o en el corazón y desde donde queremos vivir... si desde el control de la familia, de la sociedad y la vida material, o desde el servicio a la vida donde todos somos..., incluyendo a la familia, pero no por obligación, presión o control sino por un acto de amor y confianza.


En este mundo no estamos para servir a la materia, al poder, al control, tenemos libre albedrío y tenemos la libertad de poder elegir donde queremos estar y a que queremos servir pero por elección propia, no por manipulación de ningún tipo.



Cada historia, cada experiencia nos lleva a una situación nueva y distinta a la anterior. Pero la verdad es que le damos todo el poder a los hechos, a las circunstancias, a las vivencias, nos identificamos plenamente con la historia, con el dolor, el sufrimiento y la alegría, esta es la verdadera tragedia..., el verdadero sufrimiento y la falsa ilusión de creernos esa historia y esa vida…, somos nuestros propios carceleros...


Somos mucho más que experiencias, que sufrimiento, que materia, somos mucho más allá que la personalidad y el ego, somos mucho más que una  historia…,que un encierro, que una cárcel...
                                                                                        
Nuestra verdadera identidad, no está en un cuerpo físico basado en el carbono, nuestra verdadera vida no es una historia llena de penas y sinsabores guardadas en nuestras memorias, no somos sólo carne de cañón, no somos sólo materia basada en el carbono de nuestro ADN…, nuestro ADN lleva mucha más información de la que hemos creído hasta hace poco. Somos esencia sutil, somos energía invisible, somos maestros de la forma y la energía, somos los creadores de nuestras vidas y de nuestra energía desde siempre...


Nuestra historia no se remonta a unos hechos más o menos cercanos que recordamos o no, nuestra historia no está sólo gravada en nuestra mente, nuestra historia va mucho más allá de los recuerdos, de las historias, de nuestras familias y antepasados.
Nos creímos las historias de nuestros allegados, nos hemos creídos los actores de un mundo inventado por nosotros mismos, nos creímos esas historias y que eso era lo que somos...


Nuestras familias encierran nuestros mayores retos..., nuestra mayor trascendencia, nuestro mayor dolor, en nuestras familias están las mayores trabas y distracciones de nuestro camino... Nuestra familia controla nuestros pasos, nuestros errores y aciertos. Algunas familias nos encarcelan y privan de nuestra libertad y voluntad consciente o inconscientemente... Este es nuestro mayor desafío, nuestro mayor conflicto y nuestra mayor tragedia…

Soltemos los apegos de la familia, ellos nos dijeron que eramos... y como debíamos ser..., como debíamos vivir nuestra vida... que hacer o dejar de hacer con ella..., de como debíamos actuar o no...
La jerarquía dentro de la familia a causado grandes abusos, no debe haber titulo que tenga siempre la razón por llevarlo ( padres,hijos, hermanos, etc.), sólo Educadores... todos y cada uno de los miembros, todos tenemos algo que aprender del otro, sin importar que papel juguemos..., las únicas bases son el amor,el respeto y la paz


No somos nuestra familia, no pensamos, sentimos y vivimos como ellos. No somos esclavos..., prisioneros de sus ideas, conceptos, reglas, dolores o herencia. No somos propiedad de nuestra familia..., no le pertenecemos y ellos no nos  pertenecen, nadie es de nadie... Nadie puede privarte de tu libertad o elección de decidir como vivir tu vida...
La familia debe estar constituidas... por individuos independientes que practican la libertad... y comparten e intercambian. La familia debe basarse en el respeto, la sabiduría de cada uno, la libertad de todos y cada uno de sus miembros y el servicio de unos a otros sin obligación, presión o manipulación, sólo el amor debe prevalecer.
A veces existe violencia de algún tipo, verbal, física, moral, de autoridad, control, sexista, originando un encerramiento, una cárcel de las emociones, de la libertad, de los sentimientos, es la cárcel de tus miedos y problemas internos..., es la prisión de las proyecciones hechas para ti, de lo que debes hacer o no hacer..., basado en la ley del más fuerte o el que tiene más poder de algún tipo, por el lugar que ocupas en la familia, por la influencia, el control o la manipulación a que estas sometido por determinado rol.


La familia no debe ser un pilar de sometimiento, control o manipulación al que muchas veces estamos sometidos. La familia debe ser un lugar de educación, de ética, moral y de formación durante toda la vida, debe basarse en la confianza y la libertad de elección, debe ser el hogar donde descansamos de nuestros conflictos externos y donde encontramos el soporte de nuestra vida y relaciones, siempre desde el respeto, la humildad y la transparencia y el amor.


Hay un terrorismo familiar... basado en una jerarquía, en unas estructuras arcaicas y obsoletas, y donde hay papeles que tienen siempre la razón por el lugar que ocupa. Hay otro tipo de terrorismo familiar basado en el victimismo y la lástima,otro tipo de terrorismo familiar es el del más fuerte…, o el de mayor poder adquisitivo y el de menor.


Nuestra familia auténtica es... aquella con la que no usamos caretas, no nos escondemos, no nos protegemos,no necesitamos escondernos, donde no somos juzgados, ridiculizados ni desvalorizados, no tenemos deudas... con ellos, porque somos libres y ellos son libres de su conocimiento para usarlo de la mejor manera que crean y desde su ejemplo.
¿Esta es tu familia?.
¿Te identificas con tu familia?


La cárcel de cada historia te dice quien crees que eres..., y quien crees que no eres, te dice  que eres y que no eres..., como debes ser o actuar y cuando debes hacer o no hacer… Liberemos no de la cárcel de la historia, del personaje, de la herencia y vayamos mucho más allá...

A la familia muchas veces no le importa tus inclinaciones, tus pensamientos e ideas, sino que te dejes arrastrar por aquel que tiene el poder o el control, ya puede ser económico, profesional o clasista, sexista, o por el lugar que ocupa en la familia.


La cárcel de tu historia te dice que debes hacer y que no, te dice que está bien y que no, te dice quien debes ser y quien no, te dice cual es tu profesión y cuál no.

De nada vale que no compartas ideas, culturas, comportamientos o enseñanza de tus progenitores, lo único importante es que aceptes las órdenes del cabeza de familia si o si..., o del que tiene el poder en ese momento, sin importar como te sientes, como te encuentras o como vives.


Esto no es una familia, es una cárcel..., es una prisión, una jaula que te
lleva al borde de la locura y del precipicio…


Cada familia se debe basar en el respeto al otro y en la educación del otro a través del ejemplo, del amor, la paz... y la sencillez, no desde la arrogancia, y el orgullo de aquel que dice yo tengo o yo soy el poder o la razón por ocupar tal posición…
Cada miembro de la familia debe ser respetuoso, generoso, humilde, comprensivo y amoroso con el otro, la familia se debe basar en el amor, la confianza y la comunicación, sin luchas por el control o el dominio y sin importar si eres el padre, la madre, el hijo o el hermano. Se trata de relaciones basadas en la educación y la comprensión de cada individuo, interactuando de igual a igual, desde la humildad.

Los padres debemos educar a nuestros hijos en la igualdad, debemos enseñarles la comunicación, el dialogo, el intercambio sano sin segundadas intenciones. Nosotros como padres debemos predicar a través del ejemplo, la humildad y la sencillez. Y una vez que lleguen a la mayoría de edad dejarlos volar... sin miedo, control o manipulación a nuestro favor. Ser padres y hijos son roles muy serios y debemos ejercerlos basándonos siempre en el respeto y la comunicación de todos los miembros, jueguen el papel que jueguen en la familia...


La Familia debe estar para cubrirte de amor,confianza, para compartir aquello que se tiene y lo que no tiene, debe ser un canal para el aprendizaje y para el amor.
El Hogar, la familia debe ser el aroma de la Paz, la sencillez del amor, la abundancia del sol, la naturaleza de la belleza, todo en la familia debe ser armonía, música y canto donde todos celebramos las bendiciones, alegrías y alabanzas del cielo en la tierra y en la vida.


Ya basta de la cárcel de la familia...
Es hora de la libertad de Ser..., en la familia... y fuera de ella, en la familia de la tierra,la del planeta, la de la galaxia, del universo y de todos los Mundos Libres de la gran Confederación Galáctica...

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