lunes, 19 de junio de 2017

¿ VÍCTIMA O VERDUGO ?.






El ser humano ha dividido su vida en el juego de:   “ víctima o victimario “, pero en verdad, ninguno de estos conceptos son acertados, el ser humano ha elegido vivir en la dualidad y la oposición, y todo su mundo y vida a girado en torno a estos dos conceptos...

El ser humano debe aprender a librarse de estas creencias y juegos, donde solo tenemos la opción de vivir en un papel o en el otro.
Cuando el hombre elige sentirse víctima de su vida y de los acontecimientos, pierde su fuerza y su voluntad, delegando su responsabilidad en otros, o en las circunstancias, entonces, acepta que cualquier cosa le robe su vida..., admite ser una marioneta sin rumbo, ni destino y delega las elecciones en todo lo que no sea él,  volviéndose un ser agrio, frío, resentido y malhumorado, perdiendo su voluntad, su   fuerza y el reconocimiento de quien Es en verdad…

Si elegimos el papel de verdugo, nos pasamos la vida siendo aquel que controla, decide, castiga y ejerce autoridad..., pero ninguna de las dos formas nos pueden liberar del miedo, la duda, la lucha y el dolor..., ninguno de estos dos conceptos son la verdad... y la clave para ser auténticos y honrados a lo que Somos...

El ser humano debe desaparecer de los juegos desequilibrados del ego..., de los juegos de la mente... y del pensamiento dominados por el miedo y la acción/reacción...

Cuando el hombre actúa sintiéndose vulnerable e impotente ante los acontecimientos y la vida, elige la separación y la división en su interior, pero también en el exterior...
No podemos retrasar, negar, ignorar, ocultar, evadir y culpar a los demás por nuestra vida…, cada individuo debe aceptar sus circunstancias, su entorno y su vida, para comprender que nada de lo que le rodea es en verdad lo que él es..., nada de cuanto acontece en su vida es producto del azar o la suerte, sino que somos los autores de nuestras decisiones y elecciones, así como de nuestros aciertos y fracasos.
                                                                                 

No podemos creernos víctimas de nuestro entorno, de nuestra vida, pero tampoco somos verdugos de los demás, sino que somos nuestra propia víctima... y nuestro propio verdugo..., es decir, no podemos acusar a nadie de donde nos llevo la vida, no podemos responsabilizar a otro por nuestros errores o aciertos y no somos nuestras elecciones y ni decisiones…

El ser humano debe aprender a convivir día a día con su interior, con lo que siente más allá de las apariencias, los conflictos, las dudas y su propia falta de reconocimiento interior...
Tampoco somos los salvadores del mundo..., ni somos verdugos, cada uno decide a quién creer, a quien oír, a quién acercarse y con quien desea compartir su energía y vida...

Cuando elegimos un papel en nuestra vida, lo llevamos con nosotros mientras vivimos..., muchas veces de manera inconsciente, esto no nos excusa de nuestra responsabilidad…, tampoco de nuestro derecho de ser Felices y estar en Paz...

Debemos dejar de identificarnos y aceptar ideas, programas, pensamientos y roles que solo nos sirven para justificarnos a nosotros mismos, por nuestros fracasos y errores..., que además no son tales, sino la forma que elegimos para crecer y evolucionar.

El hombre pasa a lo largo de su vida por multitud de conflictos, de elecciones, aciertos y desaciertos, pero nada de esto es la esencia que somos…, nada de esto nos puede salvar de nuestra responsabilidad para con nosotros mismos, nada de esto puede librarte de decidir cómo quieres vivir, no puedes culpar a otros por tus elecciones, no puedes estar dividido dentro y fuera, no puedes alegar ignorancia, desconocimiento, miedo, duda o privación...
Mientras continuemos observándonos desde un papel determinado, mientras sigamos negando nuestra responsabilidad en otros, mientras sigamos viéndonos indefensos y vulnerables, seguiremos siendo barcos de papel a la deriva, seguiremos hundiéndonos una y otra vez en el mar del dolor y del sufrimiento...
Solo cuando el ser humano es capaz de echar un vistazo a su vida, sin rencor, dolor, desesperación, miedo y sin desgaste, hasta entonces, no veremos despejado el camino de la Verdad, de nuestra Verdad... y de aquello que somos más allá del ego, la dualidad, la oposición y el conflicto...

Ni somos víctima, ni somos verdugo, pero tampoco el salvador…, no somos el papel que creemos desempeñar, no somos nada de esto..., o al menos no debemos creernos el juego de las creencias, del miedo, del peso, la duda, ni del dolor, solo cuando te identificas con todo esto, entonces, eres lo que tu crees ser, es lo que vives y sientes…

En verdad, la Verdad está más allá de toda proyección, recreación y noción…
En verdad ningún papel es lo que tu eres..., en verdad nada de lo que crees ser te pertenece..., porque todo eso es efímero y todo lo efímero tiene fecha de caducidad..., por tanto, libérate y deshazte de todo aquello que alguna vez creíste ser..., olvida todo cuanto aprendiste a través del dolor y el sufrimiento..., abre tu Corazón, para Reinventarse de nuevo sin complejos, luchas, ni miedos...

Confía en ti más allá de lo conocido…, aprende de ti mismo y no busque que otros elijan que es lo mejor para ti…, sal de lo conocido, olvídate del resumen de tu historia..., ignora aquello que te hizo perderte en el océano de la lucha...

Reinventa-te joven, sin edad, sin tiempo, ni espacio...
Regocija-te como jamás antes..., porque descubriste la Libertad de la Verdad..., aquella que no depende de nada ni de nadie...

Solicita Ayuda... a aquel que jamás puede ignorarte, olvidarte o desaparecer..., ese que está en tu interior..., que siempre lo ha estado y siempre lo estará…

No te detengas, no busques, no esperes, sino solamente Se…, sin condición, ni miedo, ni dolor, ni distancia, ni esperanza..., porque en Verdad tu eres todo eso y muchísimo más…


Aquieta-te sin prisa, sin ruido y sin dolor... y Fluye continuamente y en Paz..., más allá de cualquier apariencia, creencia, ni conciencia, porque tu eres la Única Conciencia…, la Única Verdad y en ti todos somos Uno...

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