lunes, 18 de abril de 2016

SERVICIO A LA VIDA.




¿ Que es el trabajo?
¿Porque lo llamamos trabajo?. En verdad no es más que un servicio, una forma de generar producción de algún tipo, una forma de servicio a nosotros y a los que nos rodean, pero el sistema nos impuso recibir una remuneración a cambio de nuestros esfuerzos. Valorando cada esfuerzo de forma diferente y creando desigualdades y diferencias dependiendo del tipo de trabajo que se realice esto a creado un handicap. Unos esfuerzos están más valorados que otros, recibiendo una mayor gratificación y estatus social. Cuando la verdad es que cada uno es necesario...


El ser humano tiene unas necesidades materiales que deben de ser cubiertas y para cubrirlas es necesario realizar algunos esfuerzos, para que haya suficiente para todos. Si fuéramos capaces cada uno y todos de realizar ese servicio a cambio de aquello que no tenemos, sin medir, sin calificar y valorar unos esfuerzos mejor que otros, no existirían tantas desigualdades económicas, sociales y de clases. No sería a veces tan penoso cumplir nuestras tareas primero para con nosotros y después para con los demás.


El trabajo se ha convertido en una obligación para la supervivencia y no es lo que debería ser..., sino un Servicio para nosotros y los demás. La vida sería mucho más fácil…, disfrutaríamos participando del servicio a la comunidad. Todos cumpliríamos alegremente de nuestro trabajo, sería de manera espontánea, libre y alegre, como si estuviéramos respirando…, sin queja ni obligación, sino como la manera de ser útil a nosotros mismos y los demás.
No habría tantas desigualdades sociales, tanta competencia, marginación y abusos entre un trabajo y otro, entre los que desempeñan una labor y otra. Todos seríamos reconocidos por nuestros esfuerzos, valorando de la misma forma un servicio como otro. No existirían empleos de primera clase, de segunda y de tercera, no habría mejor remuneración que otra,ni gratificación que no fuese la propia de cada uno, conforme a las cualidades individuales. Nuestra labor iría de acuerdo con nuestras habilidades, capacidades e intereses, siendo valorados todos por igual y sirviendo a los intereses de la comunidad


El orden de las cosas no debe ser nunca material..., sino aquel que resuena con nuestro interior,con nuestro equilibrio, aquel que nos hace sentirnos útil, alegres y espontáneos.
El arte sería consecuencia de servir en aquello para lo que fuimos creados y que somos habilidosos . El arte crecería..., sería nuestra manera de ser, nuestra forma de hacer..., de crear... Al trabajar en aquello que realmente son nuestras virtudes y talentos, seríamos capaces de reconocer todos y cada uno la habilidades del vecino y las nuestras propias, sin celos, envidias o menosprecio por el otro o por nosotros mismos.
Esto nos devolvería el equilibrio entre todos y sobre todo a nuestro equilibrio interior, viviríamos de acuerdo con nuestra verdad más íntima, más real y con aquellos para lo que nacimos.

El trabajo ha sido la forma de sobrevivir de adquirir bienes materiales que hemos necesitado,el trabajo ha creado diferencias sociales, económicas, profesionales, sexistas y discriminación entre unos y otros


Un cambio en estos hábitos y costumbres, traería un re equilibrio de todo tipo..., cambiando del modo supervivencia y de  lucha entre... clases, razas y sociedad, a una sociedad y vida mucho más igualitaria, equilibrada y armoniosa. Una vida corporativa donde no hace falta sobrevivir sino Vivir... dignamente y alegres dentro de una sociedad igualitaria sin discriminación ni marginación.


La felicidad sería el orden del día...., dejar de sobrevivir sería la meta..., porque cuando aprendemos a Vivir…, significa que no le damos valor a la muerte, que no la tememos, que no importa el mañana, el futuro, sino el día a día, cada momento o instante en el que estamos…
Entonces, todos los deberías…,los no puedo, las dudas, inseguridades y temores desaparecen, no necesitamos ser mejores que…, no tendríamos que demostrar nuestra valía a nadie, ni a nosotros porque a cada instante estaríamos allí donde debemos Estar y seriamos aquello que queremos Ser, no nos opondriamos a nuestra voz Interior, sino que trabajaríamos unidos a ella.
El amor sería parte de nuestras vidas, de nuestras relaciones, de nuestro trabajo y de nuestra forma de Ser…

Debemos ver y sentir que más allá del esfuerzo del trabajo, está la necesidad de cubrir carencias económicas y materiales y muchas veces emocionales. Cuándo cambiamos la percepción de la supervivencia y la carencia, el sentido del trabajo también cambia, no nos sentimos identificados con él, sino que entendemos que debemos generar material para vivir y mantenernos en condiciones adecuadas tanto individual como colectiva-mente.

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