QUE ES LA LOCURA?

DE DONDE PROVIENE LA LOCURA?

QUIÉN ESTÁ LOCO?

Aquel que no conoce su conciencia, aquel que no es capaz de discernir, aquel que teme la vida, el mundo, a los demás, aquel que no está en el centro, ni conforme con lo que es…, él está loco. Pero la locura no es más que la imposibilidad de ver amor más allá del miedo, es no reconocer el amor por sí mismo, es dar poder a los miedos, dudas y dolores de la vida.

El loco sólo debe ser consciente de que él es la clave…, no la mente, ni los pensamientos, ni las dudas e inseguridades. Nadie está loco de por vida, todos estamos loco en algún momento o momentos, todos llamamos loco a aquellos que no comparten nuestras ideas, pensamientos o creencias. El loco no es tal…, es alguien que en algún momento o momentos perdió el control de su conciencia, alguien que se dejó dominar por impulsos a veces fuera de la lógica y la razón.

Pobre loco, pobre conciencia…, recupera tu lucidez, recupera tu cordura y confianza en el Amor y en ti. No temas,, no dudes, no prestes atención a la confusión, recupera tu autonomía y recupera el perdón hacia ti mismo y los demás. No te condenes, aunque creas que tienes condena…, no te juzgues aunque lo hagas y lo hagan. Permite te perdonarte y ser perdonado.

A veces la locura de un niño o un adulto, nos hace estremecernos, sentir escalofríos y dolor…

La verdad es que la locura de los demás nos devuelve un poco a la nuestra…, aquella que no nos permite ser realmente nosotros, aquella en la que le damos poder a cualquier voz, a cualquier concepto o idea fuera de nosotros.

De donde proviene la locura?. De estar fuera del centro... el que está en el centro no conoce más que el auto-control y la autosuficiencia en el centro del corazón, ahí donde no hay escasez, déficit, error o incertidumbre, porque ahí está la clave, la verdad, la comprensión y la sabiduría de cualquier hecho, palabra o reacción.

Donde hay dolor también hay Amor, solo que disfrazado de bajas emociones. Que estas emociones no nos arrastren a ningún lugar que no sea amor por aquel que es capaz de infringir sufrimiento a los demás y a él mismo por su ignorancia, desconocimiento o miedo.

Aprendamos a devolver amor siempre…, sea cual sea la causa, hecho o circunstancia que vivamos o escuchemos. Porque a sin seremos capaces de conocer un mundo donde no exista más la locura desmedida, un mundo donde la mayor y única locura...que pueda existir es… ver, sentir y vivir la felicidad y el éxtasis por doquier, que la respiremos, toquemos y compartamos con cualquier energía que pueda existir.

El origen de la locura se remonta a cuando hemos entregado nuestro poder de decisión, de elección y está basada en una educación deficiente en la que se ha potenciado más valorar el poder exterior, la imagen,  la opinión de otros que nuestra integridad física y mental. A veces la locura está inscrita en los genes, se pueden heredar ciertos estados mentales.¡, pero podemos liberarnos de estas ataduras energéticas, a través de un conocimiento profundo de las causas que la originaron, enfrentándose sin temor y con la confianza de que podemos alcanzar el centro del centro…

Para llegar a nuestro centro de equilibrio tenemos que atravesar los opuestos, es decir, debemos transitar estadios de conciencia y mentales que no son para nada el centro y que a veces puede parecer que vamos camino a la locura, pero la verdad es que la confianza y la voluntad de llegar a nuestro destino es la tabla que nos puede llevar a buen puerto.

Todos en algún momento de nuestra vida hemos pensado que nos estábamos volviendo locos, esto es debido a que nuestra conducta, hábitos y creencias cambian a lo largo de la vida y para el cerebro le resulta muy difícil cambiar su forma de pensar. El loco no es dueño de sus actos, es sólo una marioneta en manos de todo lo que no sea su verdad más profunda...El loco no es capaz de reconocerse, ni reconocer su verdad, para él la verdad es cualquier voz, cualquier poder que le ordene, controle o imponga. Él no es capaz de asumir su responsabilidad, compromiso o verdad, el se deja llevar por cualquier voz fuera de él.

Pero debe reaccionar, debe aprender y conocer quien es..., sin miedo y con la autoridad del Amor que él es más allá de una apariencia, idea o concepto.

La locura es sólo un nombre transitorio que todos hemos vivido en algún momento o momentos de nuestras vidas. Alcemos la voz de la cordura y del centro corazón que todos somos y cada uno..., ahí donde la única locura es Ser amor… y donde el equilibrio es nuestro Pilar en los cimientos de este templo y esta vida, como en cualquier vida...