lunes, 18 de abril de 2016

NO TE RINDAS.


No te rindas,lucha contra la adversidad. No pienses más que lo necesario, sé intrépido, audaz, cree en la buena estrella…, ésta nos pertenece pero debemos descubrirla sabiendo quienes somos y para qué estamos aquí…
Nada es eterno en la forma, sólo la energía perdura en el tiempo y el espacio. Y nosotros somos energía más allá de la forma y el espacio.
Todo es igual a Nada y la Nada es el origen de la Creación. Del caos surgió la forma, la forma no es la vida…, la forma es sólo apariencia.  La vida está más allá de cualquier forma…, de cualquier pensamiento, palabra o hecho. La vida es sentir… sin dependencia, condición, sin miedo a desaparecer, sin control de los sentidos. La vida es permanecer más allá de una historia, es sentir más allá de los sentidos, es ser atravesado por el amor, es no resistir el devenir de la vida 3D. Vivir es no sentir dolor, ni sufrimiento porque eso significa creerte la forma y no la esencia y la energía que somos más allá de la materia, más allá de la apariencia o la ilusión de una historia, de una personalidad.
Vivir es olvidarte de cualquier historia, de cualquier dolor o tristeza, tú eres mucho más allá que todo eso, sino te identificas con la forma y la persona. Vivir es estar más allá de las circunstancias, del tiempo y del espacio. Vivir no es jugar el juego de la dualidad, del miedo, del control, de la oposición.
Vivir es Ser libre...de juegos, de creencias y de la supervivencia. Vivir es no creerte nada que no venga o sientas en tu corazón, porque cuando vives desde él… a nada temes, a nada das valor más que a la belleza, al arte, a la sabiduría y al conocimiento que vive en el corazón…
Cuándo aprendes a Vivir con mayúsculas tú desapareces…, porque tu desaparición sólo es el Nacimiento en otro lugar y espacio, en todo tiempo como en ninguno.


El corazón, el latido de la vida es eterna…, no tiene fin ni principio, y en ese latido se abarca todo…, eres tú, soy yo, son las estrellas, el espacio, el vacío.
El latido del corazón abarca toda vida animada y inanimada, es el conocimiento, la sabiduría, la belleza y el amor sagrado, donde no existe condición, ni separación, miedo o imperfección. El latido del corazón es la vida donde parece no haberla, es la muerte de lo efímero, la resurrección de la forma y la transmigración del alma/espíritu.
                                                                                                          

Quien no teme desaparecer, no teme la vida porque la conoce, él sabe que la Verdadera vida no es ésta que se consume en un cuerpo físico, la Verdadera vida está más allá de la forma, más allá de lo que conoces aquí, él sabe de su magnificencia, de su fuerza, y de su amor.
El amor no conoce límites, ni fronteras, el amor es capaz de consumir toda la oscuridad, toda duda, toda debilidad. El amor no puede morir, no se puede acabar, él es la Fuerza más grande de la Creación, él no tiene rival, ni competencia, él es la heroína…, es la belleza y la sabiduría del que realmente lo conoce. El amor no puede ser derivado del caballo, él es… el jinete sin caballo, porque él es autosuficiente, él se alimenta sólo.


A través de la fuerza, de la valentía, de la voluntad y de la intención logramos dar forma al amor por nosotros mismos… Esto significa que para encontrar el verdadero amor debemos aprender a amarnos primero a nosotros mismos, no importa qué pasó, qué hicimos o dejamos de hacer, lo realmente importante es si aprendimos a ver que hay más allá de las apariencias, circunstancias, errores. No importa cuantas veces nos caímos o nos levantamos, no importa cuál fue nuestro dolor, circunstancia, o sufrimiento. Lo único que nos sirve es no rendirnos y seguir nuestro camino.
El valor debe ser nuestra bandera, la libertad nuestro destino, la sabiduría nuestra naturaleza y el amor nuestro origen…, nuestro camino y nuestra vida


Tenemos que descubrir la Verdadera Vida..., porque allí está la belleza, el amor, la paz y el equilibrio que nos aguarda a la espera de que seamos lo suficientemente valientes para atravesar nuestro propio corazón, allí está la Esencia de lo que Somos, la Esencia de Que Soy.


No nos podemos permitir rendirnos, esa no es ninguna oportunidad, no es ninguna salida, ni opción. Somos seres poderosos y con una gran fuerza interior. Todo lo que debemos hacer es confiar y apostar por nosotros..., más allá de cualquier circunstancia temporal que se pueda presentar
No nos podemos permitir entregar nuestro poder a nada ni a nadie que no sea nuestra voz interior, nuestro latido y sentir más profundo y verdadero, ahí está la llave de nuestra sabiduría y conocimiento de todo lo que somos y lo que no somos..., mucho más allá de toda apariencia, idea, concepto o percepción.

No hay comentarios:

Publicar un comentario